lunes, 7 de junio de 2010

Calle Teruel

A veces, y sin esperarlo, un olor, un sonido
o el sabor de algo etéreo me hacen volver a esos
días de la calle Teruel
sintiendo el verde frescor del césped
entre mis dedos algo mas arrugados.
Siempre quiero volver con los ojos de aquellos días,
los ojos que desacumulaban los muchos años
ya pasados y de los que no me arrepiento.

Y entonces recuerdo a mi primo con la ternura que se recuerdan
a los buenos amigos, los que quedan para la vida
y que sabes que siempre estarán a nueve números
de distancia para darte apoyo y una sonrisa.

Recuerdo a muchos otros sin asociarlos a situaciones
concretas, pero que permanecerán estáticos en un pequeño
espacio incompleto de mi materia gris,
a todas las mujeres que me hiceron llorar y
pasado el tiempo entiendo que, por desgracia, inmerecidamente.

Durante esa pequeña milésima de segundo
consigo viajar a varios años de distancia y de tiempo,
desafiando la teoría de la relatividad, pero volviendo,
como un sueño de una noche de verano,
a un presente que en un futuro seguramente vuelva
por un olor, un sonido o el sabor de algo etéreo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué chula la nueva imagen del blog!!!

Veo que te renuevas y eso me gusta.

La Calle Teruel, ay!!, la calle Teruel 4 Bis....Allí se escribieron algunas de las páginas más inolvidables de mi vida.

Un fuerte abrazo.

Manuel