jueves, 20 de agosto de 2009

Vuelta de vacaciones

Despues de un tiempo sin escribir nada debido a la cantidad de trabajo que estoy teniendo en las últimas fechas, quiero hacer una pequeña entrada para hablar sobre la vuelta de vacaciones. Es gracioso pensar la mañana que suena el despertador el día que te reincorporas de vacaciones, lo feliz que fuiste en ese preciso instante en que apagaste tu ordenador para afrontar esas merecidas vacaciones. En mi caso, y sin que sirva de precedente para futuros años, tome las vacaciones en Agosto como el 93% de los españoles. Mis vacaciones han tenido el error de comenzar un jueves y finalizar un miercoles, que a priori pueden parecer una ventaja ya que tienes dos semanas partidas por la mitad, pero que finalmente hacen que pierdas días seguidos de descanso. Como dice mi suegro... "la vida del turista es muy dura" y sabias palabras las suyas. Este año hemos ido a Nueva York, por cierto... muy recomendable, pero con el problema que te tiras andando desde las 8 de la mañana hasta las 8 de la tarde. Eso me ha llevado a tener un dolor de rodillas bastante considerable. Pero como sarna con gusto no pica... tampoco me puedo quejar, la verdad. Volviendo al tema de la vuelta de las vacaciones, yo siempre he tenido la teoría que lo malo no está en el día de vuelta propiamente dicho (a no ser que te encuentres con un marrón) sino en el día siguiente que es cuando realmente te das cuenta que has vuelto al mundo real y que las dos semanas anteriores de "descanso" han sido un pequeño kit-kat que te han sabido a poco, muy poco. El primer día lo pierdes mirando los miles de correos que tienes pendientes y contandole a tus compañeros lo bien que te lo has pasado mientras que ellos seguían trabajando (es de mal gusto decir estas cosas). Sin embargo, el segundo dia, la fria espada de damocles decide descolgarse y cortarte con la dura realidad. En mi caso, el segundo día de trabajo coincide con un Viernes por lo que el dolor se suaviza pero el lunes hará las veces de segundo día de trabajo en condiciones normales.

Esperaremos con deseo el siguiente periodo de vacaciones añorando cuando en la época de estudiante el verano realmente tenía ese nombre tan dulce y especial